La pandemia sigue dejando al desnudo situaciones complejas y cada vez más habituales en el ambiente del básquetbol. En este caso Alejandro Madera con un simple tweet reflejó la apremiante situación que viven muchos jugadores que han quedado desamparados ante tanta incertidumbre con el postergado regreso del básquetbol en las categorías del ascenso. En esta nota nos cuenta como transita este difícil momento.
Sin dudas Alejandro Madera es sinónimo de lucha en el ascenso del básquetbol nacional. Con 29 años lleva en sus espaldas varias temporadas en el Torneo Federal, algunas en la Liga Argentina, por lo que podemos decir que sin dudas es un apasionado del deporte. Hace unos días a través de un tweet reflejó como viven los jugadores esta incertidumbre sobre la vuelta del básquet y sobre ello dijo ‘‘No pensé que iba a tener tanto alcance’’.
Si bien encara la vida con la misma fuerza con que rompe las defensas rivales hoy analiza la situación y se plantea ‘‘No se hasta que punto me es redituable seguir jugando al básquet. Intento no pensar tanto en toda esta situación porque la verdad es que te volvés loco y eso te pincha mucho’’. Durante esta cuarentena vendió pastas, zapatillas y remeras como para tener un ingreso, pero afirma ‘‘Conseguir un trabajo esta muy difícil, y si surge una posibilidad se valora mucho más por la difícil situación económica en la que se vive’’.
Nunca se resigna y siempre le busca el lado positivo a la vida, que en plena cuarentena le regaló una inmensa alegría con la llegada en junio de su hijo Ignacio, fruto del amor con Sofía, de quien Ale afirma ‘‘La verdad que me aguanta un montón, ella es abogada y esta laburando bien por suerte, pero yo hoy también quisiera aportar mi granito de arena’’. Mas de seis meses sin cobrar, deudas que pagar y un futuro con un regreso aún incierto, apelando a su buen humor cordobés desliza ‘‘Lo bueno de esta cuarentena es que me ha permitido pasar mucho tiempo con mi hijo’’.
Actualmente esta en Concordia y no ha podido viajar hacia su provincia para estar junto a su madre a quien no ve desde diciembre. Para mantenerse en movimiento entrena en el Club Hípico junto a Fernando Malara, y si bien tiene un acuerdo con Sportivo América de Rosario para jugar en la Liga Argentina, mientras no vuelva la competencia no tendrá ingresos.
Alejandro describe su situación, pero sabe que esta inmerso en un ambiente que tiene a muchos protagonistas atravesando situaciones similares ‘‘Espero que se reanude pronto la actividad, hay mucha gente que depende del básquet, no solo los jugadores, también están los árbitros, los técnicos, los preparadores físicos, los utileros, los periodistas, todos necesitamos volver’’. En este contexto se encontró con situaciones en donde algunos clubes especulan con las necesidades que atraviesan los jugadores del ascenso y lo explica diciendo ‘‘Especulan con que vos querés jugar en la categoría, juegan con la necesidad de uno. Yo invierto mucho en mí, me pago el nutricionista, el psicólogo deportivo, me pago el gimnasio, alquilo la cancha para entrenar, los complementos y eso pocos lo ven, pocos lo valoran. Yo pido lo que creo que valgo, yo trabajo para valer eso’’.
Esta es la realidad de Alejandro Madera, pero no difiere a la de tantos otros jugadores que a lo largo y ancho del país siguen esperando con ansias la vuelta del básquet.
FICHA PERSONAL
David Alejandro MADERA nació en Córdoba el 29 de septiembre de 1991.
Es alero y mide 1.92. Hizo inferiores en Atenas de Córdoba y luego paso por Hindú de la misma ciudad. En la temporada 2011/12 debutó en el TNA en Huracán de Trelew. Posteriormente jugó dos temporadas en el Torneo Federal en Regatas de Concepción del Uruguay, donde disputó la final por el segundo ascenso en la 2012/13 (perdió con Barrio Parque) y la final del torneo y la final por el segundo ascenso en la 2013/14 (perdió ante Estudiantes de Olavarria e Hispano Americano de Rio Gallegos respectivamente). Luego un extenso raid en el TFB que incluye dos temporadas en Unión de Sunchales, una en Ferrocarril de Concordia y otra en Lanus, con quien perdió la semifinal por el ascenso ante Central Argentino Olímpico de Ceres. En la 2018/19 fue campeón del TFB con Central Entrerriano de Gualeguaychú y la última campaña disputó la Liga Argentina en Central Argentino Olímpico de Ceres. Ya tiene todo acordado para vestir en la próxima temporada la camiseta de Sportivo América de Rosario.