Los colonenses superaron 73-68 a GEPU en el Emilio Perazzo y empataron la final del Norte en uno. Mañana desde las 21:30 se juega el partido definitorio, con el ascenso a la Liga Argentina en juego.
El local se quedó sin el invicto de toda la temporada en casa, pero con una derrota que le enseña mucho de cara a lo que viene, que es justamente en apenas unas horas.
El arranque fue a puro nervio para los locales, tal vez conscientes de la proximidad del objetivo, pero también similar al comienzo del partido en Entre Ríos, donde impusieron condiciones. Los primeros puntos los anotó La Unión, que consiguió un parcial de 6-0 y supo sostener a lo largo de todo el primer parcial. Cuando un triple de Juan Menna parecía meter en juego al «Lobo», apareció Giménez con una respuesta inmediata de tres puntos. Mucho mérito de los visitantes, que dejaron a los de San Luis en ocho en los primeros 10 minutos y marcaron 16, sobre todo apoyados en César Lavoratornuovo, que comenzaba a transformarse en figura para los «Rojos».
Misma tónica tuvo el comienzo del segundo cuarto. Para GEPU, el aro se transformó en un dedal y la visita se alejó por 20-8. Apareció un rebote ofensivo, dos puntos de Feder Ponce y seguido un triple del «Topo» Bruno Pérez para achicar a siete. Pero, principalmente, apareció la defensa de los de Gustavo Fernández para sostener la sangría de puntos. El marcador se acercó a tan solo cuatro a la mitad del parcial, pero otra vez perdieron puntería, la visita se mantuvo certera, y la distancia alcanzó a ser de nueve. Allí apareció Agustín Maldonado para dar un golpe de efecto en el partido: rebote, asistencia, un triple y un doble para cerrar por debajo 32-28. GEPU perdía, pero estaba en partido.
Los que acompañaron al Lobo durante toda la campaña sabían que el tercer cuarto podía ser el de la remontada. GEPU siempre juega bien, pero esta vez no fue feliz el arranque del período favorito de los puntanos. Los lanzamientos seguían sin entrar casi en ningún aro, pero en el que defendía el local algunos se colaban e iban haciendo mella en el marcador. La reacción vino sobre el final, la gente desvió con sus gritos un par de tiros libres, levantó al equipo para llegar enteros y con la fe intacta al cuarto final, al que entraron 41-46.
Los últimos diez minutos fueron una montaña rusa de emociones. La gente se caía sobre los jugadores con el aliento. Los triples de Gastón Marozzi y el corazón de Gustavo Acosta pusieron a GEPU arriba por dos (66-64) a falta de un minuto. Pero todo se escapó con un triple de Brian Díaz y una pérdida de balón. Fue final 73-68 a favor de los entrerrianos, que aprovecharon el bajo porcentaje de los puntanos: tiraron para un 39% de campo y apenas para un 26% en triples. La fe y las chances están intactas para el «Lobo», que va a pelear con su alma para lograr el sueño el sábado por la noche.
Fuente: Prensa GEPU.
